La marca es puede usar como una herramienta para mejorar la productividad y la retención de los empleados.
Si el gerente se propone construir una reputación positiva a través del tiempo y de una serie de mensajes, entonces podríamos decir que se está embarcando en un ejercicio de marca. Es un intento de crear la confianza y la buena voluntad necesarias para que los mensajes sean aceptados y se actúe de manera consecuente.
Los productos de marketing hacen esencialmente lo mismo: enviar una serie de mensajes diseñados para construir una reputación positiva a lo largo del tiempo.
Y, cuando los mensajes a los empleados generan confianza y buena voluntad, a continuación, la comunicación enviada puede utilizarse para aumentar la productividad y la retención.
Por ejemplo, al publicar boletines de los empleados para clientes corporativos, se puede enfatizar la necesidad de proporcionar artículos e información de valor a los lectores (los empleados). Al hacer eso, los empleados llegan a ver el boletín de su compañía como un recurso útil, y no como propaganda de la administración. Eso, a su vez, abre la puerta a pedirles a los empleados que hagan o no ciertas cosas (medidas de seguridad, por ejemplo) y obtener una respuesta positiva de ellos.
En cierto sentido, referirse a este proceso de generar confianza y buena voluntad como marca podría ser solo un ejercicio semántico. Sin embargo, cuando ponemos un nombre a un proceso, lo hacemos más fácil de comprender y seguir. Y, ese puede ser el valor real de referirse a la marca en el contexto de la comunicación de los empleados.
Tipos de Comunicación
Veamos también este tema en un sentido más amplio, porque es importante recordar los diferentes roles de la comunicación en la productividad y la retención. Tres tipos genéricos de comunicación figuran en nuestro pensamiento: educativa, contextual y motivacional.
Comunicación Educativa
La comunicación educativa proporciona información que ayuda a otros a hacer su trabajo de manera más eficiente. Para generar confianza y buena voluntad, la comunicación educativa debe ser precisa, oportuna y funcional. Las personas que reciben nuestros mensajes deberían poder actuar sobre ellos y saber que pueden actuar con confianza.
Comunicación Contextual
La comunicación contextual proporciona una imagen más amplia, lo que debería ayudar a los destinatarios a realizar su trabajo de manera más efectiva. La comunicación contextual debe ser relevante y útil. Debe poner el problema en un marco que ayude a otros a comprender cómo las tareas o problemas específicos encajan en el flujo estratégico.
Comunicación Motivacional
La comunicación motivacional muestra a los destinatarios los beneficios de responder como lo hemos solicitado. La comunicación motivacional debe enfocarse en ellos, no en usted. Debería mostrarles la importancia de sus contribuciones.
En resumen, piense en la marca como el proceso de generar confianza y buena voluntad, un proceso que hace posible aumentar la productividad y la retención a través de la comunicación.
0 Comentarios